top of page
Logo Nuevo BC (3).png

Bernadeth Córdoba Diseño Web

Suscríbete

Cada semana comparto un recurso gratuito para ayudarte a crear tu página web, organizar tu contenido y avanzar con más intención.


Suscríbete para recibirlos directo en tu correo y ser parte de esta comunidad de emprendedoras que hacen las cosas con estrategia y corazón.

Lo que me ha enseñado prepararme para correr 21 km

Falta menos de un mes para correr la maratón Internacional de Panamá (voy por la media). Y si soy honesta, todavía no sé si estoy más emocionada o más nerviosa.



Bernadeth Córdoba, running, emprender, retos

Cuando decidí inscribirme, no lo hice porque fuera corredora (ni de cerca). Lo hice porque necesitaba ponerme una meta que me hiciera salir de mi zona cómoda. Algo que no dependiera de mi trabajo, de mi rutina, ni de nadie más. Un reto que solo dependiera de mí.

Y ha sido exactamente eso: un proceso personal, físico y mental que me ha sacudido más de lo que imaginé.


Correr 21 km se parece mucho a emprender


Prepararse para una media maratón y emprender un negocio tienen muchas cosas en común. Al principio, ambas ideas suenan emocionantes… hasta que te das cuenta del trabajo que hay detrás.


  • Tienes que aprender a escuchar tu cuerpo (o tu intuición, si hablamos de negocios).

  • Hay días en los que no ves avances, pero sigues igual.

  • Hay momentos donde piensas “¿en qué me metí?”

  • Y hay otros en los que simplemente te sorprendes de lo lejos que has llegado.


Correr me ha enseñado algo que también aplica al emprendimiento: la disciplina importa más que la motivación. No siempre quiero entrenar, pero lo hago. No siempre tengo ganas de atender, de seguir… pero sigo.Y en ambos casos, cada paso —por pequeño que parezca— cuenta.



Lo que nadie te dice del proceso

La parte más dura no ha sido el cansancio físico. Ha sido el ruido mental: esa voz que te dice que no estás lista, que vas muy lenta, que otros lo hacen mejor.


En los negocios pasa igual. Cuando estás empezando, compararte es inevitable. Pero el progreso no se mide con la velocidad de otros, sino con tu propio ritmo.Y entender eso me ha cambiado la forma de ver todo.


He aprendido a no exigir perfección, sino constancia. A disfrutar los entrenamientos buenos y los malos. A reconocer que no todos los días son iguales, pero todos suman.


Por qué lo estoy haciendo (y por qué quiero hacerlo igual con todo lo que venga)



Bernadeth Córdoba, running, emprender, retos

Me inscribí porque necesitaba recordarme que soy capaz de empezar de cero y mantenerme. Porque muchas veces creemos que las metas grandes solo son para otros, para los que tienen más tiempo o más talento.


Y no. A veces lo único que necesitas es decidirte, dar el primer paso, y confiar en que vas a encontrar tu ritmo en el camino.


En el running y en la vida, nadie llega a los 21 km de la nada. Se llega corriendo uno a uno, semana a semana, repitiendo pequeñas decisiones que parecen insignificantes… hasta que un día, te das cuenta de que ya estás ahí.


Correr me está enseñando mucho sobre paciencia, constancia y propósito. Sobre entender que lo importante no es solo cruzar la meta, sino convertirte en la persona que puede hacerlo.


Y si algo tengo claro, es que este proceso me cambió. Aprendí a disfrutar el entrenamiento, a respetar mi cuerpo y a enamorarme del proceso más que del resultado.


Tanto, que quién quita…después de cruzar esos 21 km, me anime a ir por una meta más ambiciosa: prepararme para los 42 km el próximo año. 🏅


Porque a veces, cuando te demuestras de lo que eres capaz, ya no hay vuelta atrás.

 
 
 

Comentarios


bottom of page